Teurgia o Magia blanca_ Segundo ejercicio

Posted by El Alquimista | Posted in | Posted on 19:44

0


Teurgia o Magia blanca_ Segundo ejercicio


(Controlar nuestro cuerpo con las ordenes a nuestra mente)


Este ejercicio, debe de realizarse tumbado, y extendidos con los brazos en la cama, no encima de nosotros, es esencial si no, no se puede hacer.

Tumbados en la cama, relajaremos al máximo nuestro cuerpo, la mejor forma de hacerlo es visualizando nuestro cuerpo, por lo tanto, una vez relajado el cuerpo, con los ojos cerrados visualicemos nuestro cuerpo, pero parte a parte y despacio.

En estado de relajación visualizaremos el pie derecho, lo observaremos con los ojos cerrados sin que se nos vaya la imagen, empezad a pensar que nuestro pie es cada vez más grande y que pesa mucho, mucho, ahora haced lo mismo con el pie izquierdo, todo despacio, lo vamos viendo sin perder la visualización, y comienza a ser mas grande, del mismo tamaño que el derecho, y que pesa mucho, os pesan tanto los pies que tenéis la sensación de que se hunden un poco en la cama.

Ahora seguimos con la pierna izquierda, la pierna entera la visualizamos, empieza a entrar en armonía con su pie, el tamaño es grande, y que pesa mucho, seguidamente pasamos a la pierna derecha, toda la pierna entera, se va haciendo del mismo tamaño que la izquierda.

Vamos con la mano derecha, los pasos son los mismos, pero vuestras piernas y pies siguen teniendo esa sensación de que pesan mucho, ahora pasamos a la mano izquierda, los mismos pasos de sentir como crecen y cada vez pesan mas y mas, subimos por nuestro brazo izquierdo, va tomando el tamaño de la mano, y es realmente pesado, y con el derecho nos pasa lo mismo.

Ahora, le toca a nuestro tronco, resaltando en la visión mental, nuestras extremidades, nuestro tronco va creciendo al mismo tamaño de nuestras extremidades, y somos muy pesados, sentimos como nuestro colchón se hunde del peso.

Nos queda nuestra cabeza y cuello, una fijación importante en nuestro cuello, os da la sensación de que es débil, pero que poco a poco lo vais reforzando, lega a ser muy fuerte, ahora nuestra cabeza empieza a crecer al tamaño de nuestro cuerpo, pesa cada vez mas, aun pesa mas, debemos de sentir una fuerte fuerza debajo de nosotros, nuestro cuerpo se hunde en el colchón, tened esa sensación de todo el cuerpo.

Recrearos en esa sensación, sin que nada os perturbe, cada vez pesáis mas y mas, estad así unos minutos, no muchos.

Ahora pedidle a vuestra pierna izquierda que se eleve, intentad hacer toda la fuerza posible, pero es tan pesada que no podéis elevarla, pesa una tonelada, esta clavada en la cama, ordenad a vuestra pierna derecha que se eleve, es imposible esta anclada en la cama por su peso.

Intentad con vuestros brazos tenéis la misma sensación, no se pueden levantar, el brazo es como si fuese de hierro macizo y no tenéis la suficiente fuerza para elevarlo.

Intentad incorporaos, no podéis, sois un pedazo de bloque que pesa mucho y no se puede doblar, intentad las veces que creáis oportunas hasta que desistáis.

Y nuestra cabeza, aunque nuestro cuello es fuerte, pero no se puede inclinar hacia delante, esta clavada en la almohada, por mas que lo intentamos no podemos, parece que algo nos sujeta desde la frente y nos empuja hacia abajo, es imposible, nuestro cuerpo esta totalmente tenso y bloqueado por el peso.


Ahora, una vez terminado, empezamos a desbloquear por donde empezamos a bloquear, pie derecho, pie izquierdo, pierna izquierda, pierna derecha, y así sucesivamente poco a poco.

Poco a poco vais notando como vuestro cuerpo, cada vez pesa menos, incluso ya podéis elevar vuestras piernas, esa presión del peso, va desapareciendo, os estáis liberando de ese peso y poco a poco vais sintiendo bienestar, que vuestros músculos se van relajando, que ya no deben de soportar esa carga. Y así sucesivamente hasta que tengáis desbloqueado vuestro cuerpo.


Una vez desbloqueado, no os incorporéis de inmediato, quedaos en la cama con la sensación de que no pesáis nada, que sois como una pluma, quedaos así unos minutos.

Cuando os levantéis tendréis la sensación de bienestar, y de satisfacción de que os habéis quitado una gran carga.


Este ejercicio se debe de repetir hasta que realmente no podáis mover en el trance ningún músculo.


Según lo vayáis consiguiendo me lo iréis poniendo en vuestros nombres para empezar el 3º de los ejercicios, por eso pido que no os retraséis en hacerlo mucho, y contadnos que habéis sentido.


Un saludo

Comments (0)